ADAPTACIÓN TEXTO: GraZie Magazine
La noche mágica de los niños ricos es la triste noche de los niños pobres
La noche de Reyes, mágica para algunos, puede ser una experiencia dolorosa para otros. Este artículo nos invita a reflexionar sobre las desigualdades infantiles y a recuperar la solidaridad que da sentido a estas fiestas. ¿Qué podemos hacer para devolver la magia a todos los niños?
“El hombre que guarda muchos recuerdos de su infancia, ése está salvado para siempre.” – Fiodor Dostoievski
“La infancia es el terreno donde se siembra la esperanza.” – Carl Jung
“Un niño, un maestro, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo.” – Malala Yousafzai
“La pobreza no debe ser el legado de ningún niño; la humanidad puede ser mejor.” – Nelson Mandela
“Es más fácil construir niños fuertes que reparar hombres rotos.” – Frederick Douglass
Orígenes de la Festividad de Reyes
La Adoración de los Reyes Magos es una festividad que se remonta al siglo III. Celebrada como el colofón de la Navidad, esta fecha simbolizaba la manifestación del Niño Dios a todos los habitantes de la tierra, conocida como Epifanía. Los protagonistas, tres misteriosos personajes guiados por una estrella hasta Belén, representaban los tres continentes conocidos: África, Europa y Asia, así como las etapas de la vida: juventud, madurez y ancianidad.
El Misterio de Amor y la Pérdida de la Inocencia
La Epifanía fue durante siglos una fiesta ecuménica, celebrada como un Misterio de Amor en el que Dios mismo se entregaba como regalo a la humanidad. Sin embargo, este sentido original se ha ido diluyendo, perdiéndose también la inocencia que debería caracterizar a esta fecha. Como dijo Dostoievski: “El hombre que guarda muchos recuerdos de su infancia, ése está salvado para siempre”. La falta de esta inocencia trae consigo un mundo falto de sonrisas, ternura y amor.
El Cambio de Tradiciones
Cada uno de los Magos ofreció ricos presentes al Niño Dios, inspirando comportamientos que marcaron la festividad posterior. En el siglo XIX, España adoptó la costumbre de hacer regalos, convirtiendo el 6 de enero en una celebración social que desplazó el sentido religioso. Este cambio generó desigualdades: mientras los niños ricos disfrutan de sus sueños cumplidos, los niños pobres encuentran su calzado vacío de ilusiones.
El Dolor de los Niños Olvidados
La noche de Reyes se convierte en una noche amarga para los niños pobres. Estos pequeños, despojados del hechizo de la Navidad, pierden una parte irrecuperable de su infancia. Como reflejó Miguel Hernández en sus versos:
Una Llamada a la Solidaridad
GraZie Magazine desea dedicar un cariñoso recuerdo a todos los niños desamparados, víctimas de la falta de solidaridad en un mundo deshumanizado. Recordemos que la infancia es un regalo único e irrepetible que merece ser protegido y celebrado.
Reflexión Final
Queremos hacer un llamado a la acción y la empatía. Cada niño merece una infancia llena de ilusiones, independientemente de su condición social. La noche de Reyes debe ser un recordatorio de que, como sociedad, tenemos la responsabilidad de cuidar y proteger a los más vulnerables. Regresemos al espíritu de amor y generosidad que esta festividad representa. Porque cada sonrisa infantil es un paso hacia un mundo más humano y solidario.
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Sobre la autoría

VIDA Y OBRA DE ÁNGEL GUTIÉRREZ SANZ
Ángel Gutiérrez Sanz nace en Alaraz (Salamanca) 20 de Julio (1939) en el seno de una familia cristiana, donde se tenía aprecio por la cultura. Fue el más pequeño de una familia numerosa, integrada por siete hermanos. Aquí aprendería las primeras letras. Apenas cumplidos los 11 años, abandona su pueblo natal con destino al internado que los PP. Dominicos tenían en La Mejorada, provincia de Valladolid, luego vendrían otros internados en la provincia de Segovia, Toledo y Ávila, por lo que solo pudo disfrutar del calor de familia en las vacaciones estivales. A los 12 años murió su padre y a los 23, aún sin haber concluido su carrera de filosofía en Madrid, murió su madre, por lo que se vio obligado a trabajar para costearse sus estudios de Filosofía, graduándose finalmente en Madrid por la Universidad Complutense, el año 1964.
Una vez licenciado en Filosofía y Letras y con los estudios completos de Teología, se puso a trabajar como profesor en colegios privados de Madrid. Posteriormente obtendría el grado de doctor por la misma universidad Complutense de Madrid, pero antes de que esto sucediera, fue llamado a filas y tuvo que cumplir su servicio militar, lo que supondría para él un grave contratiempo, al ver truncada su carrera y su vida profesional apenas iniciada. Una vez cumplidas sus obligaciones con la Patria, fue admitido en el mismo colegio que estaba trabajando y la vida volvería a recobrar su ritmo.
En el año 1967 se casaría con la pedagoga Francisca Abad Martín, fijando su residencia en Madrid.
A partir de este momento, Gutiérrez Sanz vivió entregado a la vida familiar, que supo conjugar perfectamente con su profesión de docente y también con sus estudios, porque en los primeros años de matrimonio, Ángel Gutiérrez estaba ocupado en preparar sus oposiciones, para obtener una plaza como profesor numerario de filosofía, a la vez que trataba de concluir su tesis doctoral. Fueron años difíciles, en que tuvo que trabajar duro y sin tregua, para conseguir lo que consiguió. Cierto que a su lado tuvo siempre a una amiga y colaboradora, que siendo ya madre, no solo supo hacer frente a las circunstancias, manteniendo intacta durante cinco años la licencia por estudios, concedida por el Ministerio de Educación, para que pudiera cursar la carrera de Pedagogía, sino que logró que los ojos de su marido pudieran contemplar la realidad con el verde de la esperanza.
Pasados estos primeros años de matrimonio, la situación fue mejorando. La tesis doctoral que llevaría por título "La Ética en Baltasar Gracián" llegó a feliz término, mereciendo la máxima calificación de "Sobresaliente cum laude", siendo publicada posteriormente. Y sobre todo la obtención de una plaza como profesor titular de filosofía y luego como catedrático de esta misma asignatura, iba a suponer que Gutiérrez Sanz pudiera dedicarse a su pasión de escribir.
En su dilatada vida docente en la enseñanza publica, ha desempeñando diversos cargos directivos, pero ello no ha sido obstáculo para seguir trabajando en el campo de la investigación. Su compromiso al servicio de la cultura ha quedado patente, tanto en las aulas como fuera de ellas, bien como conferenciante en diversos foros, en el Ateneo de Madrid por ejemplo, así como en colaboración con diversos medios de comunicación social, a través de revistas filosófico-teológicas, históricas. educativas o de pensamiento.
Digno de reseñar es que, siendo catedrático y jefe del Seminario de Filosofía del Instituto Miguel Servet de Madrid y en colaboración con un equipo de profesores de este mismo seminario, obtuvo el Primer Premio Nacional del Segundo Concurso de Prensa sobre artículos, en la modalidad de reportajes sobre Pedagogía, convocado por la Fundación Santa María (S.M.).
En el año 1904, Ediciones TAU saca a la luz su primer libro titulado " Aspectos de una sociedad en crisis", en donde el autor apunta las directrices por donde habría de discurrir su pensamiento.
A partir de entonces su vocación como escritor fue haciéndose más determinante, hasta el momento de su jubilación.
MÁS INFORMACIÓN EN: https://blogculturalgutierrezsanzangel.blogspot.com/p/sobre-mi_10.html